Lo peor de estos conceptos de producto y/o diseño es que generan frustración.
Porque lo ves, te llama la atención, te ilusionas, imaginas que algún día verán la luz, te planteas tenerlo… y finalmente nunca llegan a hacerse realidad.
Es pronto aún para saber si este diseño de Alexei Chugunnikov terminará en algún escaparate algún día, pero soñar no cuesta. Te avisamos, no lo parece a primera vista, pero es un móvil. Y aún hay más.
Aparentemente una simple pulsera.
Si te fijas un poco más verás que es un reloj que genera la hora mágicamente con números que parecen flotar proyectados sobre la piel de tu muñeca. Pero si coges una pequeña pieza de la parte inferior, tiras de ella y la enganchas en el extremo de tus dedos la palma de la mano se convierte en el soporte de una pantalla táctil translúcida digna de “Minority report” o similar.
Y por supuesto si te llevas la mano a la oreja lo que tienes es un móvil. El móvil-pulsera. Totalmente ergonómico y antropométrico pues el tamaño de tus manos determinará el tamaño del “auricular” y la distancia entre altavoz y micrófono serán totalmente a medida.
Ahora sólo falta esperar que alguien decida fabricarlo.
Visto en Gizmodo.
0 comentarios:
Publicar un comentario