"Conducir utilizando cascos, auriculares u otros dispositivos que disminuyan la atención a la conducción o utilizar manualmente dispositivos de telefonía móvil, navegadores o cualquier otro sistema de comunicación" detraerá 3 puntos del carné. El texto de la nota de prensa no es del todo concreto, no obstante, dado que "conforme a los avances de la tecnología, se podrán precisar reglamentariamente los dispositivos incluidos en este apartado".
"Conducir vehículos que tengan instalados mecanismos o sistemas encaminados a inhibir la vigilancia del tráfico, o que lleven instrumentos con la misma intención, así como de inhibición de sistemas de detección de radar" será motivo de sanción con seis puntos negativos. La multa será de 6.000 euros según el diario El País, y las empresas instaladoras podrían llevarse un "premio" de entre 2.000 y 3.000.
El tema de los inhibidores y todo lo que se mueve alrededor de ellos seguramente seguirá siendo el típico juego del gato y el ratón, pero tal y como está escrito no queda duda del espíritu de la Ley. Un poco más preocupante es el tema de los GPS, y es que al paso que vamos será sanción hasta "buscar petróleo" en los semáforos. ¿Qué sucede con los navegadores activados con voz? ¿Y con los sistemas de proyección en el parabrisas? Rubalcaba afirma que dadas las facilidades para pagar las multas (ahora se podrá descontar un 50% si se pagan en 15 días tras la notificación) esta no es una Ley recaudatoria, pero viendo algunas de las nuevas infracciones graves no nos queda más remedio que expresar nuestras dudas.
Puedes consultar el PDF de la Dirección General de Tráfico.
Visto en Engadget.
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